Está claro que hay muchas plazas de garajes ajustadas, pero
la de este señor, que por el idioma en el que se maneja debe de ser holandés (o
belga de la parte flamenca), bien merece estar en el medallero.
En un hueco de 1 metro 55 centímetros de ancho, aparca un coche que tiene 1 metro y 49 centímetros de ancho. ¡Tan sólo dispone de 6 cm de margen, 3 cm por cada lado! Siendo así, no es de extrañar que necesite bajar la ventanilla para abrir la puerta del salón antes de poder salir del coche.
Para este tipo de casos extremos,
donde el margen de espacio es mínimo, lo más aconsejable sería instalar unas
bandas acolchadas, en ambas paredes, de 1 cm de espesor, fabricadas en espuma
de polietileno recubiertas por una capa de PVC resistente. A diferencia de las
alfombras viejas que este señor ha colocado a modo de protección mural casera,
las bandas acolchadas de protección son resistentes al posible roce continuo
con la carrocería, absorben los impactos, señalizan y son higiénicas.